El Zenit notó en la ida la falta de ritmo competitivo (no disputaba un partido oficial desde el 11 de diciembre) y acabó perdiendo con gol en los últimos minutos de McGregor, uno de los jóvenes valores de un Celtic que pretender luchar por el título europeo. Tercero en la fase de grupos, el conjunto de Rogers comienza a competir cuando actúa de visitante, cosa que antes le costaba. Aquí defiende la mínima ventaja en cancha de un Zenit que ha perdido tres veces en lo que va de temporada en casa (uno en la fase previa de la propia Europa League y dos veces en liga). En Glasgow volvía tras el parón, pero con una semana de trabajo tras esa exigente ida, el cuadro de Mancini se antoja más peligroso.
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El Zenit notó en la ida la falta de ritmo competitivo (no disputaba un partido oficial desde el 11 de diciembre) y acabó perdiendo con gol en los últimos minutos de McGregor, uno de los jóvenes valores de un Celtic que pretender luchar por el título europeo. Tercero en la fase de grupos, el conjunto de Rogers comienza a competir cuando actúa de visitante, cosa que antes le costaba. Aquí defiende la mínima ventaja en cancha de un Zenit que ha perdido tres veces en lo que va de temporada en casa (uno en la fase previa de la propia Europa League y dos veces en liga). En Glasgow volvía tras el parón, pero con una semana de trabajo tras esa exigente ida, el cuadro de Mancini se antoja más peligroso.