Vamos a usar el West Ham / Manchester City de la novena semana de 2014 de la Premier League como ejemplo. Los Hammers, incluso con la ventaja de jugar en casa, fueron valorados muy por debajo del campeón de la pasada liga, el City, basándose en la trayectoria a largo plazo de ambos equipos.
Se esperaba por parte del West Ham un promedio de 0,85 goles por partido contra los 1,90 goles del Manchester City.
Un enfoque de Poisson situaría al City ganando alrededor del 62% de este tipo de partidos, el West Ham se haría con el 15%, y el 23% terminaría en empate.
Estas probabilidades eran consistentes con los datos disponibles antes del comienzo del encuentro.
Los apostantes deben ser conscientes de que la probabilidad de anotar goles tiende a acelerarse a medida que transcurre el tiempo, ya que los jugadores están más fatigados y asumen mayor riesgo en sus acciones.
Este dato se pone de relieve al comprobar que el 45% de los goles se marcan antes del descanso, mientras que el 55% se anota en el segundo tiempo.
Un ajuste más apropiado para calcular las expectativas de gol de cada equipo en un momento dado del encuentro viene dado por la siguiente ecuación, derivada de datos reales sobre goles marcados en la Premier League. (El símbolo ^ significa “elevado a” o “potenciación”)
Expectativa restante de gol = Expectativa inicial * Tiempo restante ^ 0,85
Veamos un ejemplo. Si un equipo tiene una expectativa inicial de gol igual a 1 para todo el partido, al llegar al descanso del encuentro, su expectativa restante será de:
1*(0.5^0.85) = 0.55
Lo que significa que solo el 55% de las expectativas de gol permanecerán intactas para la segunda parte. Por supuesto, podemos usar la ecuación para calcular las expectativas de gol restantes en cualquier momento del encuentro, lo que será muy útil para los aficionados a las apuestas en directo.
Consejos para ser un apostador de fútbol bueno
Justo en el momento anterior al primer gol anotado por el West Ham en el minuto 21, cuando quedaba el 78% del tiempo de partido por jugar y el marcador estaba empate a cero, las respectivas expectativas de gol para ambos equipos habían bajado del 0,85 y el 1,9 respectivamente, al 0,69 y 1,54 goles.
Si tomamos estos datos revisados para West Ham y Manchester City y los introducimos en una distribución de Poisson, podemos generar líneas de anotación y obtener probabilidades asociadas que ofrezcan resultados posibles para una victoria del equipo de casa, del equipo visitante o de un empate.
IMPACTO PRODUCIDO POR UN GOL SOBRE LAS APUESTAS EN VIVO.
Veintiún minutos de tiempo sin marcar vieron aumentar las probabilidades de un empate del 0,23 al 0,26 por ciento. Las oportunidades de victoria del City cayeron del 0,62 al 0,58 y las del West Ham permanecieron en torno al 0,16.
Estas cifras cambiaron drásticamente cuando Morgan Amalfitano marcó para los Hammers. Si ignoramos el efecto que este gol tuvo en el nuevo escenario que se abría en el partido, las probabilidades de anotación inicial para el resto del partido siguen siendo las calculadas en la ecuación mostrada anteriormente.
Sin embargo, en caso de que el West Ham “empate” durante los setenta minutos restantes, habrán ganado el partido, ya que ahora llevan un gol de ventaja.
Así que, con 1-0 y 21 minutos transcurridos, el enfoque de Poisson, utilizando las expectativas de gol modificadas para cada equipo, daría un 42% de probabilidades de victoria al equipo de casa, no olvidemos que partía con el 16% al inicio del partido. Esto muestra el impacto que tiene un gol sobre el resultado final del partido.
En general, el 45% de los goles son anotados antes del descanso, mientras que el 55% restante, son anotados en la segunda parte.
Las probabilidades de victoria de los Hammers aumentan desde ese 16% inicial y pueden hacerse con la victoria tras otros 74 minutos de fútbol. La probabilidad de empate es ahora del 26%.
Por tanto, y hablando de apuestas en directo, cada escenario depende de la fortaleza inicial de ambos equipos, del tiempo de juego restante y del marcador actual, junto con los factores adicionales, como las tarjetas rojas, por ejemplo.
Y el City llegó a ir perdiendo por 2-0. Un equipo con una desventaja de dos goles tiene que “ganar” la parte restante del partido por dos goles para recuperar un punto, o por un margen de tres o más para llevarse los tres puntos en juego. Podemos utilizar el enfoque de Poisson, con las expectativas de gol modificadas, para calcular las probabilidades de ambos supuestos, empate o victoria del City.
A pesar del gol de David Silva en en el minuto 77, y con el poco tiempo que quedaba por jugar, el West Ham todavía tenía un 70% de probabilidades de llevarse el partido.
A pesar de la cercanía del premio, el gol de Silva podría haber elevado la tensión de los fans, si lo comparamos con el momento en que el Ham abrió el marcador una hora antes y la diferencia de goles era la misma en el marcador.
Un enfoque de Poisson para un equipo específico utilizado en la estimación de probabilidades supone una mejora en el uso de los resultados genéricos.
Por ejemplo, en promedio, un equipo de casa gana alrededor del 70% de los partidos en los que anota el primer gol en el minuto 21. Un enfoque puro de Poisson dio al West Ham una probabilidad de victoria del 42% en ese momento, lo que refleja las capacidades percibidas respectivamente para cada equipo.
Datos de apuestas reales de aquel día daban a los Hammers en torno a un 35% de posibilidades de victoria después de anotar el primer gol, lo que tal vez indica el esfuerzo por aumentar su capacidad anotadora en los equipos que van por detrás en el marcador.
También podría representar el hándicap que supuso para los Hammers una temprana tarjeta amarilla, lo que podría comprometer su rendimiento durante el resto del partido.
